Que no se nos olvide

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Ann Santiago
No solo lo que pasó. Sino lo que sigue pasando.Que no se nos olvide que aquí todo se vuelve noticia un día… y meme al siguiente. Que enterramos muertos con flores y discursos, pero sin consecuencias. Y eso también mata.Murieron 231 personas en Jet Set. Y ya volvimos a lo mismo. A las fiestas. A los reels. A la indiferencia. Se velaron los cuerpos, sí. Pero ¿la justicia? ¿Y los responsables? Bien, gracias.Que no se nos olvide Friusa, donde lo que pedían era respeto… y lo que recibieron fue gas. Bombas. Represión. Y el mismo guion de siempre: que “no tenían permiso”. Como si para pedir dignidad hubiese que llenar un formulario.
Que no se nos olvide que los préstamos siguen, pero los salarios no suben. Que la deuda pública ya supera los 59 mil millones de dólares. Y nadie sabe dónde está ese dinero. Pero tú lo vas a pagar. Tu hija lo va a pagar. Tu nieto, aunque no lo hayas visto nacer, ya tiene deuda encima.
Que no se nos olvide que los feminicidios no se detienen. En lo que va de 2025, 17 mujeres han sido asesinadas por razones de género. Y todavía hay titulares que los llaman “crímenes pasionales”. Como si el amor matara.
Que no se nos olvide que la corrupción es política de Estado. Casos como Medusa, Calamar y Antipulpo ya no nos escandalizan porque los bandidos ahora tienen oficina y los ladrones se visten de corbata. Aquí no se castiga al corrupto. Se le nombra ministro, asesor o cónsul.
Que no se nos olvide que la inseguridad no solo está en las calles… está en las instituciones. En el sistema de justicia. En los jueces que se venden. En los expedientes que “se caen”. Aquí el que comete un delito tiene que rogar que sea famoso o millonario. Si no, va preso con rapidez quirúrgica.
Que no se nos olvide. Porque aquí la memoria no es débil. Es silenciada. Y si dejamos de repetirlo, de escribirlo, de gritarlo… entonces sí lo perdimos todo.
Porque si olvidamos esto, si lo dejamos pasar como si fuera solo “una noticia más”, entonces no fue una tragedia. Fue simplemente una pausa entre la próxima tragedia.