Getting your Trinity Audio player ready...
|
Por Miguel SOLANO
— ¿Quién inventó a JA en esta reunión?
— La pregunta es quién te invito a tí.
— Es verdad.
Habíamos sido convocados para una reunión continental y discutir, aprobar y diseñar una nueva conducta de los aparatos de inteligencia en los procesos electorales que serían patrocinados para promover los cambios democráticos.
La mentalidad criminal de los aparatos de inteligencia era, y aún sigue siendo, un hormiguero de cobardes criminales, gente que mataban porque tenían licencia, pero en más del 90 por ciento de ellos, eran incapaces de enfrentar a un hombre en términos iguales. Organizar emboscadas, secuestros, traiciones eran sus especialidades. A ese aparato había que enfrentarlo y transformarlo. Aún hoy en día, los Estados, como acaba de ocurrir aquí, en República Dominicana , aprueban leyes dándoles poderes dictatoriales y dejándoles las manos libres para el crimen.
Peter era un rubio, ojos azules, casi 6 pies, 190 libras, nacido en Oregon de padre y madre polacos. Terminó su servicio militar, pasó un tiempo en la marina y luego ingresó a la CIA. Yo siempre sospeché que le gustaban más los muchachos que las mujeres.
Cuando nos encontramos en la reunión, Peter lucía incómodo. Nos habíamos visto envueltos en un altercado cuando Fidel Castro, invitado por Leonel Fernández, visitó la República Dominicana.
Peter fue comisionado para organizar un atentado contra el líder de la Revolución Cubana. Yo, para hacerlo fracasar. Incluso había obtenido Luz verde para sacar de circulación a Peter. Raul Castro le salvó la vida