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147 Años del Nacimiento de Francisco Villa: El Centauro del Norte, Líder Revolucionario, Estratega Militar y Defensor del Campesinado

147 Años del Nacimiento de Francisco Villa: El Centauro del Norte, Líder Revolucionario, Estratega Militar y Defensor del Campesinado
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  • Publishedjunio 8, 2025
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Por Araceli Aguilar Salgado

“Yo soy de los hombres que cuando tienen un ideal, lo siguen hasta la muerte.”  Francisco Villa

La historia de México está marcada por figuras que, con su lucha y determinación, transformaron el rumbo del país. Entre ellas, Francisco Villa, también conocido como Pancho Villa, destaca como uno de los líderes más emblemáticos de la Revolución Mexicana. Su nombre evoca la resistencia campesina, la lucha por la justicia y el profundo deseo de igualdad en una sociedad marcada por el latifundismo y la opresión.

 

Pero ¿quién fue realmente Pancho Villa? ¿Un revolucionario comprometido con los ideales de justicia social o un estratega militar que aprovechó el caos del momento? Para entender su legado, es necesario analizar su historia, su papel en la Revolución y el impacto que dejó en México.

De bandolero a líder revolucionario

Francisco Villa nació en Durango, México, el 5 de junio de1878, bajo el nombre de José Doroteo Arango Arámbula. Su juventud estuvo marcada por la pobreza extrema y las injusticias del sistema porfirista, que favorecía a grandes terratenientes mientras millones de campesinos sobrevivían en la marginación.

La leyenda sobre Villa comenzó cuando, tras asesinar a un hacendado que intentó abusar de su hermana, tuvo que huir y convertirse en bandolero, encontrando refugio en las montañas del norte de México. Sin embargo, su visión trascendió el mero bandolerismo y, cuando Francisco I. Madero lanzó el Plan de San Luis en 1910 llamando a la rebelión contra el dictador Porfirio Díaz, Villa se sumó a la lucha.

El profundo conocimiento de los caminos del norte y la lealtad de los campesinos lo convirtieron en líder natural de la División del Norte, uno de los ejércitos revolucionarios más temidos y efectivos del conflicto. Su audacia en el campo de batalla, su estrategia militar y su capacidad de movilizar combatientes fueron claves para el triunfo inicial de la Revolución.

Su papel en la Revolución Mexicana


Después de la caída de Porfirio Díaz, Villa apoyó a Madero, pero pronto se vio envuelto en la lucha contra Victoriano Huerta, quien derrocó y asesinó a Madero en 1913. En esta etapa, la figura de Villa creció aún más, y junto con Emiliano Zapata, lideró un movimiento agrarista que exigía el reparto justo de las tierras.

Su victoria en Zacatecas (1914) fue crucial para la derrota de Huerta y abrió el camino para la llegada de Venustiano Carranza al poder. Sin embargo, la alianza entre Villa y Carranza se rompió rápidamente, pues el gobierno constitucionalista no compartía las reformas radicales que Villa y Zapata buscaban implementar.


La guerra interna entre revolucionarios culminó con la derrota de Villa en Celaya (1915) ante el general Álvaro Obregón. A partir de ese momento, Villa perdió el poder militar y político, y comenzó a operar como guerrillero en el norte de México, hostigando al gobierno carrancista.

La última batalla y su legado

Con la consolidación del gobierno de Carranza, Villa quedó relegado al aislamiento político. En 1920, tras la muerte de Carranza, aceptó una amnistía del nuevo gobierno y se retiró a la Hacienda de El Canutillo, donde intentó formar una colonia agrícola y vivir en paz.

Sin embargo, el temor de los nuevos líderes revolucionarios, como Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles, ante una posible reactivación de Villa, llevó a su asesinato en Parral, Chihuahua, el 20 de julio de 1923.

A pesar de su muerte, el legado de Francisco Villa sigue vivo en la memoria del pueblo mexicano. Su lucha por la justicia, aunque no siempre estuvo libre de controversias, lo convirtió en un símbolo de resistencia y transformación social.

Francisco Villa fue mucho más que un guerrillero; fue un estratega, un líder y un hombre que encarnó el deseo de justicia del México campesino. Aunque su visión agraria no se consolidó en el México posrevolucionario, su legado influyó en la política agraria de los gobiernos posteriores y en el imaginario histórico del país.

Su vida estuvo marcada por la lucha, por la contradicción entre el idealismo y la crudeza de la guerra, pero también por el profundo compromiso con las causas populares. Villa representa la fuerza del pueblo que se niega a vivir bajo el yugo de la opresión.

A 147 años de su nacimiento, Francisco Villa sigue siendo un símbolo de la resistencia y del México campesino. Sus acciones y su visión de justicia agraria dejaron huella en la política mexicana, aunque sus ideales no lograron consolidarse de manera definitiva en el México posrevolucionario.

Hoy, su figura inspira corridos, películas, novelas y debates históricos sobre su papel en la Revolución Mexicana. Algunos lo ven como un héroe, otros como un bandolero, pero lo que es indiscutible es que su legado sigue vivo en la memoria del pueblo mexicano.

La historia de Francisco Villa es un recordatorio de que la lucha por la justicia social es un camino lleno de desafíos. Aunque no alcanzó plenamente sus objetivos, su vida representa la voz de aquellos que enfrentaron la opresión y buscaron un México más equitativo.

A 147 años de su nacimiento, su legado sigue resonando en la historia y en el corazón de México su nombre sigue siendo sinónimo de revolución, valentía y justicia social.

El país debe ser gobernado por alguien que realmente quiera a su gente y a su tierra, y que comparta la riqueza y el progreso.” Francisco Villa

Araceli Aguilar Salgado Periodista, Abogada, Ingeniera, Escritora, Analista y comentarista mexicana, del Chilpancingo de los Bravo del Estado de Guerrero E-mail periodistaaaguilar@gmail.com

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